Fenisa
“Camina, que amor
venganza me está pidiendo.
Si quiere amor, un alma porque tiene
sufrimiento en sus penas y tormentos,
yo, amor, que amando a muchos mucho, siento;
no es razón que tu audiencia me condene;
razón más justa, amor, será que pene
la que tiene tan corto pensamiento
que no caben en él amantes ciento
y amando a todos juntos se entretiene;
si quien sólo uno ama premio espera,
con más razón mi alma le merece,
pues tengo los amantes a docenas.
Dámele, ciego Dios, y considera
si con uno sólo se padece,
yo padezco con tantos muchas penas.
(…)
No más de como es. Ve y abre, vamos
y no quieras saber, pues eres necia,
de qué manera a todos los estimo
a todos cuantos quiero yo me inclino,
los quiero, los estimo y los adoro;
a los feos, hermosos, mozos, viejos,
ricos y pobres, sólo por ser hombres.
Tengo la condición del mismo cielo,
que como él tiene asiento para todos
a todos doy lugar dentro en mi pecho.”
María de Zayas, «Fenisa», en La traición de la amistad